La venganza se sirve fría

Hace 5 años Dallas se adelantaba 2-0 en las Finales y tras tener muy encarrilada la serie se derrumbaba de manera estrepitosa perdiendo los 4 partidos siguientes y ganando así Miami Heat el anillo. Gran culpa de aquello la tuvo Wade pero un gran porcentaje también fue de los árbitros, sobre todo con un final de partido escandaloso en el Game 5. Aquello supuso un gran golpe para los Mavs y sobre todo para sus dos estrellas: Dirk Nowitzki y Jason Terry.

5 años después se han quitado ese gran peso de encima, frente al mismo rival y además en su cancha al igual que hicieron los Heat. En estas Finales había un claro favorito que era Miami, mientras que nadie daba un duro por Dallas Mavericks como era lógico y normal. Pero Dallas a base de defensa, juego colectivo y de confiar en su único jugador franquicia han acabado dando la sorpresa cargándose a Lebron, Wade, Bosh y compañía. Tras dar la sorpresa (sin tener factor cancha) los Mavs llegaban a Miami 3-2 por delante teniendo dos partidos para ganar 1, por su parte Miami no se podía permitir ni un fallo.

El partido tuvo varias partes. La primera sorpresa (o no tanto) fue que Spoelstra se cargase a Bibby del equipo dándole la titularidad a Chalmers. Miami salió en tromba en busca del Game 7 con un Lebron desconocido durante estas Finales, pero salió Terry y a base de puntos de todos los colores remontó el partido dando a Dallas ventajas de hasta 9 puntos y silenciando así el American Airlines Arena. Miami reapareció antes del descanso acercándose en el marcador pero en el segundo tiempo cayeron de manera estrepitosa coincidiendo además con la aparición de Dirk Nowitzki. El alemán hizo un 1/12 en la primera mitad mientras que en la segunda anotó 19 puntos. En el último cuarto Miami dio síntomas de impotencia y en ningún momento daban la sensación de poder remontar por lo que parecía que el primer anillo llegaba a Dallas. El marcador final fue de 95-105 (máxima diferencia de estas Finales). El mejor del partido fue Jason Terry con 27 puntos pero el MVP de las Finales ya tenía dueño.

De la cancha los Heat se iban cabizbajos y llorando como Bosh mientras que en Dallas lógicamente era todo lo contrario. Llegaban anillos para jugadores que lo habían buscado mucho y por fin lo conseguían como Jason Kidd (2 Finales perdidas), Marion (fracaso tras fracaso en Phoenix) y sobre todo Dirk Nowitzki. El alemán llevaba años tras ese premio que por fin anoche consiguió, siendo además nombrado MVP de las Finales con promedios de 26 puntos- 9,3 rebotes y 2 asistencias con unos porcentajes de 97% en tiros libres, 36% en triples y 41% en tiros de campo. También hay que acordarse de Rick Carlisle, muchos creían que no lo haría bien en PO pero le ha dado un baño táctico a Spoelstra y ha demostrado que es un gran entrenador. Conviene decir a parte de las estrellas también es el anillo de Chandler (enormes Finales), Barea (ayer otro partidazo más), Stevenson, Cardinal, Haywood, Mahinmi, Stojakovic (clave frente a los Lakers), Beaubois, el lesionado Butler,... todo un equipo.

El anillo de los Mavs viene también a demostrar otra cosa, para conseguir el anillo no existen atajos. Demuestra que la figura del jugador franquicia aún está por encima de los grupos de estrellas reuniéndose para ganar antes (a pesar de Boston '08). Dirk Nowitzki se convierte también en el primer jugador franquicia que guía a su equipo a el campeonato (aunque sea el 2º en conseguir el MVP de las Finales por detrás de Tony Parker), ya es leyenda de la NBA.

Así termina la temporada 2010/11, con una gran sorpresa y alegría para muchos. Desde aquí solo podemos decir: Congrants Dallas and congrats Dirk, you deserved!